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Todavía no lo sabes, pero este ventilador de cuello se va a convertir en tu nuevo mejor amigo. Porque si algo aprendimos con cada nueva ola de calor que sufrimos –y ten por seguro que en breve tendremos la primera del año– es que cualquier solución para rebajar la temperatura corporal, por muy loca que parezca, siempre será bien recibida.
Especialmente si se trata de una que no implique la instalación de enormes aparatos en casa que solo vamos a usar de vez en cuando y que ocupan mucho espacio y, sobre todo, que no gasten tanta energía como para que tengamos que estar preocupados por la factura de la luz que nos llegará en unas semanas. Una quimera, pensarán muchos al leernos.
Lo curioso es que no te hayas dado cuenta ya de que esa solución infalible lleva siglos entre nosotros. Porque así descrito estamos hablando de tener a mano algo tan simple de usar y tan efectivo para refrescarnos como los abanicos, que si han sobrevivido tantos años es porque se han demostrado como el remedio perfecto y más ecológico para luchar contra el calor cuando el termómetro sube más de lo esperado.
El único problema es que para utilizarlo tenemos que estar lo suficientemente ociosos como para renunciar a usar las manos en otra cosa que no sea para abanicarnos. Y claro, eso implica que toca aguantarnos y sudar cuando, por ejemplo, estamos trabajando frente al ordenador, leyendo un libro, tumbándonos en el sillón para tomar una merecida siesta, preparando la comida o echando una partida en la consola a nuestro juego favorito.
¿Pero y si te dijéramos que existe un aparato que une la sencillez del abanico con la comodidad del aire acondicionado? ¿Uno que refresca tanto como un ventilador pero consumiendo una energía ínfima comparada con la de aparatos de gran tamaño? ¿Uno que además seguramente ya lo has visto usar en redes, porque se ha hecho muy viral, pero que no sabías si se trataba de una broma? Pues ya te adelantamos nosotros la respuesta: no lo es. Al contrario.
Se trata de este innovador, compacto y unipersonal ventilador de cuello de Jisulife. Un dispositivo que se parece mucho a unos auriculares inalámbricos de diadema de toda la vida pero que, en lugar de música, ofrece una refrescante y constante corriente sobre el rostro que solo notarás tú. De hecho, esa es otra de las grandes ventajas de tenerlo siempre a mano: adiós para siempre a las discusiones en la oficina o en casa por la temperatura del aire acondicionado.
Como todo avance tecnológico adelantado a su tiempo, al principio es normal recelar sobre si este ventilador personal realmente funciona. Pero nada más sencillo para resolver cualquier duda que leer las opiniones de usuarios que ya lo tengan en su poder en páginas como Amazon, donde acumula más de 26.500 reviews positivas de gente alabando las virtudes de un aparato que cuenta con una puntuación de 4,3 estrellas sobre 5 y, por cierto, también asequible a cualquier bolsillo: solo cuesta 32,99 €.
Con tres velocidades distintas de aire para adaptarse a las necesidades ambientales de cada momento, entre las características que más destacan los usuarios sobre este miniventilador están su ligereza, ya que solo pesa 268 gramos y por lo tanto te olvidas de que lo llevas puesto; el material ABS con el que está fabricado resistente al sudor y a la suciedad; y sobre todo su batería, recargable a través de un puerto USB y que dura de 4 a 16 horas dependiendo de la intensidad del aire.
Algo que también se destaca mucho es lo seguro que es usarlo, sobre todo para quienes tengan miedo de que el pelo pudiera quedar enganchado. Incidente que no puede ocurrir bajo ningún concepto ya que este ventilador no tiene aspas (funciona con un motor de alta potencia) y sobre todo porque los 78 orificios por los que expulsa el aire, que ofrece una experiencia de frescor de 360º, son demasiado pequeños para que algo así suceda.
Y por último algo muy importante: si te preocupa parecer ridículo llevando este aparato puesto, debes saber que está disponible en cuatro colores para que puedas elegir el que más se ajuste a tu estilo. Aunque incluso esto debería darte lo mismo porque como bien dice el refrán, o al menos una versión veraniega del mismo: "ande yo fresquete, ríase la gente".
Por cierto, que si el verde no te convence, es importante saber que también está disponible en varios colores más. Eso sí, un poco más caros. Pero lo importante es poder elegir y, siendo sinceros, pagar unos pocos euros más por tener el modelo que realmente te gusta tampoco es un gran drama teniendo en cuenta todo el confort que te llevas a cambio.
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