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Cabello
Los mejores champús para hombre según cada tipo de pelo: liso, rizado, con canas, afro, fino, grueso…
¿Tienes el pelo grueso? ¿Fino? ¿Liso? ¿Rizado? ¿Teñido? ¿Con canas? ¿Eres calvo? Sea cual sea tu tipo de cabello, encontrarás el champú que mejor va con tu melena aquí y ahora.
Photograph courtesy Getty Images; Collage by Gabe Conte
¿Cuáles son los mejores champús para hombre? Es imposible elegir un solo ganador. El mejor champú es el que mejor se adapta a las necesidades de cada uno. El pelo de cada persona es diferente, y lo que funciona para alguien con el pelo grueso y seco no funcionará para alguien con el pelo graso y fino. En este caso, la división hace la fuerza.
De hecho, es probable que necesites tener más de un champú a mano, dependiendo de la necesidad que quieras satisfacer en un momento concreto o de otros factores fuera de tu alcance como, por ejemplo, la meteorología. ¿Tienes el pelo fino y, además, propenso a la caspa? ¿El pelo afro y decolorado al máximo? ¿Ondulado y propenso a la rotura? Sea cual sea tu problemática, no te preocupes: los soldados más fuertes libran las batallas más duras y nosotros te vamos a ayudar a triunfar en la tuya.
La frecuencia del uso del champú es cosa tuya, pero nuestra sugerencia es que te lo laves cada tres días. Sin embargo, si tienes el pelo demasiado graso, querrás lavártelo casi a diario, mientras que alguien con el pelo rizado preferirá recurrir al cowashing. Se trata básicamente de averiguar cuál es el limpiador capilar que mejor se adapta a ti. En GQ hemos realizado muchas pruebas para poder recomendarte los mejores champús para hombre en 20 categorías. De aquí al perfect match hay un solo paso.
El mejor champú para el cuero cabelludo graso: Tea Tree Special Shampoo, de Paul Mitchell
Toda la gama Tea Tree está formulada a base de aceite de árbol de té, por lo que este champú, así como el resto de la gama de productos para el cuidado del cabello de la marca, neutraliza los hongos y las bacterias a la vez que regula la producción sebácea. También reduce la inflamación, por lo que también es ideal para aquellos cueros cabelludos más controvertidos, independientemente de si son grasos o no.
El mejor champú para pelo seco o dañado: Nº4 Bond Maintenance Shampoo, de Olaplex
Este champú forma parte del que es uno de los sets champú + acondicionador favoritos de GQ. ¿Por qué? Elimina la suciedad capilar sin dañar la cutícula de las hebras y, si lo usas junto con el acondicionador de la misma casa, serás poseedor de la melena perfecta. El secreto está en el Bis-Amino Diglycol Dimaleate, una molécula exclusiva de Olaplex cuya función es la de encadenar aquellos enlaces de disulfuro rotos o debilitados durante procesos químicos (teñido, decoloración, secado o planchado, por ejemplo) para, literalmente, reestructurar el cabello de dentro hacia fuera.
El mejor champú para pelo en proceso de afinamiento: Rosemary Scalp Scaling Shampoo, de Aromatica
El pelo fino, bien por genética, como consecuencia del inevitable proceso de envejecimiento o como daño colateral del debilitamiento causado por procesos médicos o biológicos; presenta desventajas (más fragilidad, más rotura, menos firmeza, menos volumen) que se traducen en un dolor de cabeza constante para miles de hombres y mujeres.
Este limpiador capilar de la marca cosmética seulense busca combatir esta problemática con una solucióm sin sulfatos ni siliconas que introduce en su fórmula el extracto de romero, el componente natural predilecto de los tricólogos que ahora divulgan en TikTok para fomentar el crecimiento capilar por sus propiedades calmantes y vasodilatadoras -hay estudios que comparan sus efectos con los del Minoxidil, sin ir más lejos-; y la biotina.
El mejor champú con efecto voluminizador: Pure Abundance Volumizing Shampoo, de Aveda
Los champús voluminizadores nutren y fortalecen el cabello sin apelmazarlo, resecarlo ni aportar peso. El champú de la casa Aveda, apto para uso diario y formulado a base de goma de acacia orgánica certificada, extracto de flor de caléndula, jugo de aloe vera, proteína hidrolizada de trigo y miel; es una alternativa de referencia (para sorpresa de nadie).
Otra alternativa que hemos probado y nos fli-pa es el champú voluminizador de REF, marca capilar sueca vegana, sostenible y cruelty free con casi dos décadas de trayectoria. Con proteína de quinoa y aceite de ricino, con función fortificante; aceite de jojoba, hidratante y nutritivo; y extracto de albaricoque, reparador; aporta vigor, volumen y densidad capilar desde el primer lavado. Ah, e incluye filtro solar, por lo que tu pelo estará protegido de las maldades de la exposición solar, y una tecnología protectora del color, para que este se mantenga vivo y, en el caso de que sea de peluquería, como si acabaras de salir del salón.
El mejor champú para pelo grueso: The Soft Shampoo, de Maria Nila
El pelo grueso requiere de aceites suavizantes y agentes hidratantes que eviten el encrespamiento y el cabello bufado. Y aunque los términos “suave” y “fuerte” puedan resultar opuestos de primeras, en este caso sí son equivalentes. Especialmente en una fórmula nutritiva como la de Maria Nila, que también incorpora filtros UV gracias a su complejo activo Colour Guard.
El mejor champú para pelo rizado: Curl Quench + Coconut Oil Shampoo, de Maui Moisture
La atención que requieren las melenas rizadas es tal que estas cuentan con su propia metodología de cuidado capilar, denominada Método Curly (Curly Hair Method, en inglés). Al fin y al cabo, tiene sentido: el pelo rizado es seco por naturaleza, tiende al encrespamiento y a los enredos imposibles, tiene un volumen a veces indomable, es menos brillante, se caracteriza por un tacto más áspero, etc. Entre las sugerencias de este Método Curly está, por ejemplo, la huída de los sulfatos, que pueden resecar aún más el cabello, y las siliconas no volátiles ni solubles en agua, que pueden acumularse en la hebra y crear una película que no permita la entrada de activos hidratantes y nutritivos.
Este champú formulado con aloe vera, aceite y agua de coco y extracto de papaya cumple con absolutamente todos los requisitos del Método Curly… y con nota, ya que define, mejora la forma de los bucles y los suaviza desde la primera aplicación. Lo sabemos de primera mano.
El mejor champú para pelo afro: Manuka Honey & Yogurt Hydrate + Repair Shampoo, de Shea Moisture
El pelo afro precisa del mismo mimo que los rizos, por lo que es obligatoria la presencia de ingredientes hidratantes que no añadan peso a las hebras y así no reduzcan el volumen. La principal diferencia es que también necesitan más ingredientes suavizantes para reducir el encrespamiento.
Shea Moisture, marca predilecta para los reyes y las reinas del rizo, cuenta con un sinfín de alternativas para la limpieza capilar, como este champú con miel de manuka, elaborada únicamente por las abejas que polinizan los arbustos de manuka de Nueva Zelanda; yogur y manteca de karité orgánica que limpia en profundidad a la vez que nutre, reconstruye y aporta cuerpo al pelo seco y dañado.
El mejor champú para el pelo liso: Love Smoothing Shampoo, de Davines
Los mayores enemigos del pelo liso son el encrespamiento, las puntas abiertas y la rotura. El champú alisador Love de Davines elimina el exceso de grasa y suciedad sin invitar a ninguno de esos invitados indeseados a la fiesta. En su lugar, proporciona la máxima hidratación durante el lavado y una experiencia ultrasuave de peinado.
El mejor champú redensificante para pelo fino: Force & Volume Shampoo, de L'Occitane
Los champús redensificantes aportan cuerpo a cada mechón, fortaleciéndolos a largo plazo y aportando densidad lavado a lavado. El resultado es un cabello visiblemente más grueso y con más volumen, incluso al tacto.
Esta fórmula de la marca cosmética oriunda de Manosque “actúa directamente sobre la fibra capilar dotándola de más materia y haciéndola más voluminosa”. ¿Su secreto? Una fórmula sin siliconas y a base de aceite esencial de ylang ylang, aceite esencial de romero y proteína vegetal hidrolizada que promete una fibra capilar más densa con el triple de resistencia.
El mejor champú anticaspa: Dercos Technique Anticaspa DS, de Vichy
Junto con la caída de pelo, la caspa representa el complejo capilar más determinante entre los hombres de todo el globo terráqueo. Para combatirlo, nuestro más reciente premio GQ de Cosmética Masculina al mejor producto capilar: una fórmula con disulfuro de selenio y ácido salicílico que erradica al instante la descamación y, con el uso continuado, la mantiene alejada de tu cuero cabelludo durante seis semanas.
El mejor champú de lujo: Sublime Gold Shampoo, de Miriam Quevedo
¿Quieres darte un capricho extra para un pelo digno de alfombra roja? Este champú de la firma cosmética de lujo es oro. Literalmente, además, ya que su fórmula incluye oro bioactivo de 24 quilates, así como células madre de olivo silvestre y néctar de Vitamina D, un cóctel de activos que “nutre en profundidad sin hacer pesado el cabello y ayuda a regenerar el corazón de la fibra capilar y el cuero cabelludo”. Para disfrutar de sus efectos en su máxima potencia, eso sí, déjalo actuar entre 2 y 5 minutos.
El mejor champú para pelo teñido: Color Care Shampoo, de Living Proof
Muchos champús prometen proteger el cabello teñido, pero conviene asegurarse de que el producto que elijas también lo cumpla. De lo contrario, terminará apagando el color y tendrás que volver a la peluquería en muy pocas semanas. Living Proof va un paso más allá al fortalecer el cabello y resguardarlo de otros agentes que alteran el color, como la cal del agua y los rayos UV.
El mejor champú para cabello decolorado o platino: Blonde Perfecting Purple Shampoo, de Moroccanoil
La máxima prioridad a la hora de mantener el cabello decolorado o platino, además de aportarle las máximas dosis de nutrición e hidratación con las que compensar su fragilidad intrínseca, resultado de un proceso químico muy agresivo; es evitar que se vuelva amarillento o anaranjado (depende de si tu cabello natural tiene un subtono frío o cálido). Para ello, deberás echar mano de los champús morados, que ejercen una función de neutralización que responde a la teoría del color, ya que los pigmentos azulados y violetas son opuestos a los amarillos y naranjas en la escala cromática. Parece magia, pero es ciencia.
Una de nuestras fórmulas predilectas para matizar el pelo es esta propuesta de Moroccanoil. Ideal para usar una vez a la semana, aportará a tu melena un tacto sedoso y un plus de nutrición gracias a la archiconocida base de aceite de argán de la marca.
El mejor champú para pelo canoso: Silver Shampoo, de L'Oreal Profesionnel
Al igual que el champú para cabellos rubios y platinos, los champús para pelo gris y blanco grises deben matizar el tono para evitar que este amarillee y pierda luminosidad. Con esta fórmula enriquecida con aminoácidos y agentes catiónicos y con micropigmentos violetas, tu pelo parecerá plata de ley 925.
El mejor champú para calvos: Scalp Shampoo, de Sachajuan
Con la cabeza expuesta a todos los elementos, es necesario contrarrestar el exceso de producción sebácea, la exposición solar, la sequedad y la descamación cutánea. Si es tu caso, te conviene un champú para el cuero cabelludo que elimine esa grasa e impida que la piel se reseque.
El Scalp Shampoo de Sachajuan, con ácido salicílico y extracto de jengibre, mantiene el cuero cabelludo hidratado pero sin engrasarlo ni obstruirlo. También previene y combate la descamación gracias a la presencia en su fórmula de la piroctona olamina y el climbazol, por lo que es muy probable que te baste con usarlo una sola vez a la semana.
El mejor champú exfoliante: Scalp Revival, de Briogeo
El champú exfoliante es una opción perfecta para personas con cuero cabelludo sensible, graso y con tendencia a la descamación. Para nosotros, el mejor es el exfoliante para el cuero cabelludo de Briogeo con carbón, magnesio, aceite de árbol de té y aceite de coco, que nutre tanto el cuero cabelludo como el cabello. Como no es excesivamente arenoso, no tendrás que preocuparte por la rotura capilar ni por los arañazos inesperados.
El mejor champú seco: Original Dry Shampoo, de Batiste
Quien tiene un champú seco en su baño también tiene un tesoro. Sobre todo aquellos días en los que se te pegan las sábanas y no te da tiempo a pasar por la ducha. Se trata de una fórmula en formato aerosol que, aplicada sobre la raíz del pelo a una distancia de 20 centímetros, absorbe el exceso de grasa para un aspecto más limpio sin tener que recurrir al agua y champú capilar convencional. La duración de los efectos no es infinita, te avisamos, pero sí lo suficientemente larga como para salvarte de algún apuro. ¿Un tip de experto? Aplica una pequeña cantidad el día que te laves el pelo para obtener un plus de volumen y textura.
Después de haber probado muchas alternativas, tanto asequibles como más selectas, nos quedamos con un clásico de poco más de 3 euros que, además de acabar con el exceso de suciedad capilar en plena vorágine, también aporta volumen y textura. ¿Nuestro gran descubrimiento beauty? Efectivamente.
El mejor champú en pastilla: Original Remedies Jengibre Vital, de Garnier
Han pasado relativamente pocos años desde que los champús sólidos se han establecido sólidamente -nunca mejor dicho- en nuestra rutina de cuidado capilar como la solución perfecta para limpiar nuestra melena. Al fin y al cabo, no son solo más sostenibles, sino también más rentables (duran más que los formatos líquidos) y prácticos (puedes volar en avión sin que te pongan impedimentos en los controles de seguridad).
La línea Original Remedies de Garnier, con un enfoque natural, cuenta con un sinfín de variantes de esta pastilla, como esta solución fortificante que da luz, brillo y cuerpo al pelo apagado.
El mejor champú detox
¿Sientes que tu pelo está más graso de lo normal o que se ensucia con más facilidad? Es probable que haya llegado el momento de someterlo a un tratamiento detox que purifique tanto la melena como el cuero cabelludo para ‘empezar desde cero’.
Esta fórmula limpiadora con vinagre de sidra de manzana concentrado, queratina hidrolizada y glicerina derriba el mito que vincula los champús detox con la sequedad absoluta. Y es que, si bien elimina la suciedad de los productos de styling, el exceso de grasa y las impurezas; también refuerza, nutre e hidrata la fibra capilar.
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